Códigos de Ética Corporativos: No existía un enunciado específico sobre las conductas que se espera de los empleados dentro de la firma Madoff . Es por este motivo que se hizo la gran estafa de todos los años en Estados Unidos puesto que no existía ciertos códigos de ética. Así fue como se pudo burlar de los clientes. Capturaba a nuevos clientes debido principalmente a dos motivos: Por un lado, la mencionada alta rentabilidad -de hasta el 12% anual-. En segundo lugar, por su prestigio y el aura de exclusividad que otorgó a su sociedad. Madoff fue presidente del consejo de administración del índice Nasdaq de EEUU, uno de los más importantes del mundo, lo que le daba credibilidad. Además, reclutaba a sus clientes en clubes exclusivos, como el Palm Beach de Florida, y su reputacion creció entre estas personas ricas hasta llegar incluso a grandes de la banca internacional.
Gerentes, jefes y comités éticos: Lamentablemente Madoff era el que manejaba la empresa como el veía conveniente ya que era el presidente de la firma de inversión que el fundo en 1960. Por ese motivo, el era el único responsable de como la firma manejaba la ética.
Consultores éticos: Si existía un sistema de regulación por la cual paso la firma Madoff pero la gran pregunta es como pudo pasar desapercibido a grandes entidades financieras y reguladoras durante más de 40 años. He aquí una posible respuesta:
Engañó a los consultores externos haciendo una estrategia llamada “piramide invertida” esto quiere decir que es un tipo de fraude que consiste en pagar las rentabilidades prometidas con el dinero que va entrando de nuevos clientes del fondo de inversión. De tal modo que en la base se encuentra el primer inversor y éste va recibiendo plusvalías de los nuevos accionistas que entran. El problema es que si dejan de entrar nuevos clientes, la pirámide se derrumba. Es un sistema de fraude que ya tiene más de 100 años.
Auditoría, contaduría y reporte: A pesar de existir dichos reportes y auditorias Madoff supo como hacer frente a sus problemas mediante un engaño bien formulado como el de la pirámide invertida para que sus inversores que exigían mayores ganancias no se vieran perjudicados y comenzó a tapar huecos y hacer otros. Es por eso que el fraude deja en entredicho el sistema regulatorio de EEUU. El patrimonio de Madoff bajo su gestión era oficialmente de 17.000 millones de dólares, aunque en realidad estaba moviendo cantidades que pueden superar los 50.000 millones. Esto quiere decir que una parte del dinero nuevo que entraba en el fondo se invertía directamente en la cartera, pero otra parte se desviaba a pagar rentabilidades a los accionistas. La SEC ha alegado que Madoff fue muy inteligente al rechazar facilitar a sus clientes acceso a sus cuentas por Internet. Según ‘Washington Post’, enviaba los informes por correo ordinario, mientras que la mayoría de los ‘hedge fund’ lo hacen por e-mail para facilitar su análisis.
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